28 noviembre, 2006

ANSIEDAD POSITIVA, EUSTRÉS

Durante toda nuestra vida nos han pintado el estrés como algo malo. La verdad es que yo no sabía ciertamente lo que era ( a pesar de ver a mi madre estresada todos los días) hasta este año. Para mí, el estrés se ha convertido en mi sombra, es mi compañero allá donde voy, me acompaña a la universidad y a casa y, en el mejor de los casos, los fines de semana decansa y me deja descansar. El estrés es esa sensación de agobio que te crea la enoooorme cantidad de cosas que tienes que hacer y que no sabes por donde empezar, es la sensación que te genera el saber que no llegas a todo en un día porque, a pesar de las 24 horas de su duración se te hace corto.
Hoy he descubierto que hay un tipo de estrés bueno, el eustrés, me explico, hay un psicólogo llamado SEYLE que diferencia el estrés malo o distrés y el estrés bueno o eustrés. Para animar a todos los estresados como yo, voy a explicar en que consiste esto del eustrés o ansiedad positiva.
Todos sabemos que nuestro organismo está preparado física y psicológicamente para responder a situaciones que suponen para nosotros un reto. Normalmente, nos desenvolvemos y hacemos fente a las distintas situaciones de nuestra vida sin mayor problema, con un nivel determinado de actividad, que en palabras de otro psicólogo, en este caso Goleman "una cantidad moderada de ansiedad en el ambiente nos moviliza adecuadamente". Este concepto de ansiedad positiva va muy unido al ya mencionado eustrés que se define como el tipo de presión que es capaz de movilizar nuestra acción, consiguiendo en el individuo una activación positiva, que le permita utilizar todos los recursos disponibles, bien sean personales o externos para él, para dar respuesta a la situación que se le plantea. Suena bien verdad?, pues que sepais que además existen unas variables eustresoras como la autoestima, el autocontrol, la resistencia emocional de la persona...que nos permiten afrontar las situaciones que muchas veces nos desbordan.

Os voy a poner un ejemplo de lo que se conseguiría con la mezcla de las variables eustresoras internas y externas: Según la teoría de la felicidad de Martin Seligman, habría que intentar aunar una vida placentera (en la que los placeres saludables tuvieran cabida), una vida buena (en la que se fomenten en toda medida posible las distintas actividades que aportan gratificación a la persona) y una vida con sentido (que ayude al sujeto a trascenderse a sí mismo) para tener una vida feliz.

Ale, intentadlo, a ver si conseguís ser felices.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nos ha gustado muuuuucho!

Gracias de corazón

http://asociacionrespiroyluz.blogspot.com