31 diciembre, 2006

EL FIN DE LA TREGUA

Durante estas fiestas he hecho un parón vacacional a la hora de escribir, pero lo que pasó ayer en la terminal 4 del aeropuerto de Barajas en Madrid me ha hecho hacer un alto en este parón y plasmar en este post lo que pienso y lo que siento.

Todos sabemos que ayer explotó una furgoneta bomba que destrozó cinco plantas de la nueva terminal del aeropuerto de Madrid, y todos sabemos quien la hizo estallar, ETA. Pese a los intentos del gobierno por que se cumpliera el alto al fuego, pese a las concesiones que ha hecho a la banda terrorista para seguir con el diálogo, no ha salido bien, Jose Luís Rodríguez Zapatero se ha equivocado. Y qué hace el presidente: SUSPENDE el diálogo, no lo rompe, lo suspende. Muy propio de él, el iluminado de la Moncloa se ha convertido en el gobernante más desastroso de democracia española. Su gobierno no solo no acepta el apoyo del PP para volver al pacto antiterrorista, sino que le hecha la culpa de que critíque las declaraciones del presidente 9 horas después de producirse el atentado. He de recordar que José Blanco hizo exactamente lo mismo cuando se produjo el mayor atentado terrorista en la historia de España.


El pacto, el diálogo, las negociaciones, la tregua, el proceso de paz está roto, aunque para algunos ya se rompió en octubre cuando la banda terrorista robó algunas armas para su evidente rearme.


En fin, debemos esperar que pasará, mientras tanto, sólo nos queda rezar para que las cosas vuelvan a su cauce y que por una vez el gobierno actúe con cordura y sensatez y no con rencor y resentimiento.




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